BRECHA: Entrevista por la situación de la Enseñanza Secundaria


20 de mayo de 2011

 
 
 
Denuncian campaña de desprestigio contra la educación pública

Todos los dardos hacia ahí

Las autoridades del CODICEN y el MEC desmintieron que el gobierno estudie remover antes de agosto a las autoridades de Secundaria. En entrevista con BRECHA, Martín Pasturino afirmó que, más allá de quien esté al frente, lo que se necesitan son acuerdos nacionales para procesar cambios profundos en ese nivel

Escrito por: Carolina Porley

Secundaria. Foto: J. Castel
Secundaria. Foto: J. Castel
 
Las autoridades del Codicen y el mec desmintieron que el gobierno estudie remover antes de agosto a las autoridades de Secundaria. En entrevista con Brecha, Martín Pasturino afirmó que, más allá de quién esté al frente, lo que se necesitan son acuerdos nacionales para procesar cambios profundos en ese nivel.
La información publicada por el diario El País el miércoles pasado basada en fuentes anónimas del Poder Ejecutivo, que aseguraba que el gobierno estudia remover antes de agosto a las autoridades designadas políticamente en el Consejo de Secundaria (ces), es además de “falsa”, “imposible”, dijeron varios jerarcas del Codicen y del mec en las últimas 24 horas a distintos medios de prensa. El director de Educación del mec, Luis Garibaldi, dijo que nunca se estudió tal eventualidad, y el presidente del Codicen, José Seoane, confirmó el respaldo de ese órgano a todos los consejeros del ces y a los de los otros consejos desconcentrados que conforman la anep. Además, aclaró que no es competencia del Poder Ejecutivo destituir a la directora general del ces, Pilar Ubilla, ni al consejero Fernando Tomeo, sino del Codicen, para lo cual se requieren mayorías especiales.
El mismo miércoles 18, consultado sobre si se iban a remover las autoridades de Secundaria, el presidente José Mujica no negó la versión y dijo que no sabía si los cambios pasaban por ahí.
El País también dijo que en el lugar de Ubilla, el gobierno maneja poner al ex consejero del ces, Martín Pasturino. Se trata de un profesor de Secundaria y utu que actualmente es director del Área de Empleo y Formación Profesional del inefop. Pasturino tiene perfil técnico y experiencia en reformas de la educación media (estuvo a cargo de la implementación de los bachilleratos tecnológicos durante la gestión de Germán Rama). Su designación en 2005 en el ces generó resistencias en los sindicatos, aunque luego el vínculo mejoró tras su participación en las negociaciones con los gremios ante el Ministerio de Trabajo y en varias comisiones.
DESPRESTIGIO. A raíz de la nota de El País, varios jerarcas de la educación aprovecharon para denunciar la existencia de una campaña mediática de desprestigio contra la anep y la educación pública en general, incluyendo a la Universidad de la República. Así lo afirmaron, entre otros, Seoane y la vicepresidenta del codicen, Nora Castro. Agregaron que se privilegian las informaciones negativas e inexactas, y se escriben editoriales acusadores contra los jerarcas y los docentes. El diagnóstico es compartido por los sindicatos y la unidad temática de Educación del Frente Amplio (véase Brecha, 13-V-11).
Hasta ahora, aparte de El País, que habló públicamente sobre la necesidad de hacer remociones en Secundaria, fue el consejero del Partido Nacional en el codicen, Daniel Corbo, quien en entrevista con Búsqueda (14-IV-11) afirmó que el gobierno tiene que iniciar “transformaciones de envergadura” en la educación o “prescindir” de las actuales autoridades de la enseñanza, agregando que algunas medidas sobre las que hay acuerdo generan resistencia en las propias autoridades designadas políticamente, y que hay “una suerte de enfeudamiento sindical” en los consejos desconcentrados.
Uno de esos temas en los que cuesta avanzar –precisamente propuesto por Corbo– es el de dotar de mayor autonomía a los centros educativos, fundamentalmente a los liceos. Sin embargo, según afirmó Seoane a Brecha, lo que hay son “matices teóricos y de alcance” en algunos cambios, pero también hay consensos y un proyecto en marcha de fortalecimiento de los centros educativos.
Varias fuentes afirmaron que la situación de la educación media preocupa mucho al Poder Ejecutivo por considerarla uno de los principales obstáculos para el crecimiento sostenido y la equidad. Además, el gobierno considera que las autoridades de la enseñanza deberían actuar de forma más decidida y tener una hoja de ruta más clara. También la atd de Secundaria cuestionó la actuación del Consejo en varios temas.
Consultado sobre el punto, Martín Pasturino dijo a Brecha que más que cambiar a los jerarcas que estén al frente de Secundaria, lo que se necesita para superar la situación crítica de la educación media es un acuerdo nacional que viabilice políticas de largo plazo y un trabajo de negociación con los sindicatos docentes, sin el cual es prácticamente imposible avanzar.
Pasturino aclaró que ninguna autoridad del Poder Ejecutivo ni del Codicen se comunicó con él para expresarle lo que afirmó El País.
Adhirió a los cuestionamientos sobre la forma en que se está discutiendo públicamente la situación de Secundaria: el uso político que la oposición está haciendo del tema, la focalización de los problemas en las autoridades actuales y la estigmatización de los docentes.
CAMBIOS. Sobre los cambios profundos a encarar, Pasturino dijo que muchos de ellos tienen que ver con una reforma de la gestión. Afirmó que en materia de infraestructura “no existen excusas para no tener los locales en condiciones”, y que para cambiar la realidad actual es necesario modificar la estructura extremadamente centralizada que existe hoy, que limita la posibilidad de actuar con celeridad ante las dificultades. “Hay que avanzar en temas de gestión para que todo el mundo cumpla con sus responsabilidades y con sus horarios, y se controle que las cosas se hagan. Actualmente el sistema produce una dispersión de las responsabilidades e inacción”, afirmó.
Sobre los cambios reglamentarios en materia de pasaje de grado y asistencia a clase, afirmó que “centrar la discusión en si se está siendo más o menos exigente es una estupidez (…) son los docentes los que exigen o no, con el reglamento que sea”.
También se refirió a la flexibilización respecto al número de faltas que pueden tener los alumnos para no repetir el año, y dijo que no necesariamente es un error: “El tema es complejo y hay que avanzar en la cultura de la asistencia, porque en la escuela los niños llegan a tener 50 faltas porque los padres no los mandan cuando llueve, o se duermen y no los despiertan, o dicen que tuvo que quedarse cuidando al hermanito o cuidando la casa… Con esa cultura llegan a secundaria y entonces repiten en primer año porque tienen más de 20 faltas. Lo que hay que hacer es trabajar como está haciendo Primaria con la campaña cero faltas”.
Pasturino cuestionó la tendencia a culpabilizar a los docentes de todo y dijo que la mayoría de los educadores son muy responsables y que sólo una parte muy menor (10 por ciento) es la que genera la mayoría de las inasistencias que se registran. Afirmó que hay que trabajar en una política de incentivos y estímulos para bajar el ausentismo.
Sostuvo que esas políticas también son necesarias en el Ciclo Básico: “Hoy les pagamos menos a los docentes de primer ciclo que son los que enfrentan los grandes retos educativos, con un tipo de alumnado que es muy complejo porque, como dijo el presidente, los chiquilines hoy son otros, no son los mismos que hace un tiempo se quedaban 40 minutos sentados en clase. Las condiciones de trabajo hoy en un liceo de primer ciclo son difíciles, lo que redunda en mayores exigencias para los docentes que, contrario a lo que debería ser, cobran menos que en bachillerato”.
Cuestionó la estigmatización de algunas ideas que se vienen poniendo sobre la mesa para reformar la educación media y aseguró que “la autonomía de los centros educativos de la que venimos hablando hace tiempo, por lo menos desde la pasada administración, tiene que ver con tradiciones institucionales. Por un lado está la cultura anglosajona descentralizadora, y por otro la francesa fuertemente centralizadora, que es la que copiamos nosotros. La mejora de la gestión no es una cuestión de izquierda y derecha, ni tiene nada que ver con el neoliberalismo, es algo que necesitamos hacer para tener a los jóvenes dentro del sistema, y eso es de izquierda”, afirmó.